Regina Spektor – How
Siempre he tenido un debate en la mente: ¿Es más fácil sentir una conexión con una canción cuando está toca temas más personales? Y este es el ejemplo perfecto que serviría como una prueba significante.
No recuerdo exactamente cuándo fue que escuché por primera vez esta canción, ya conocía muy bien a la artista desde antes pero nunca había sentido un vínculo como este antes (Y eso es difícil, las canciones de Regina Spektor tienden a ser muy poéticas).
Primero que nada, tómate unos minutos para escuchar esta obra de arte:
Ahora, cabe mencionar que cuando mi obsesión por esta canción empezó tenía alrededor de catorce o quince años de edad. Algo extremadamente irónico. Amar esta canción al nunca haber tenido ningún tipo de relación formal previamente, cuando la propia canción es exclusivamente de amor. Si, siempre tendré eso en la cabeza: Ironía.
En mi caso, el vínculo con la canción fue mutando poco a poco. Analizando el pasado puedo decir que el sentimiento que la canción mandaba era auténtico, o por lo menos mucho más que la canciones promedio que se solían escuchar por aquellos años en que salió (Para referencia, “Stupid Hoe” de Nicki Minaj sonaba por esos tiempos). Conforme los años pasaron el vínculo con esta canción evolucionó, ya no era simplemente la empatía, ahora ya compartía algunos de los sentimientos, no solo los entendía. Y aunado a eso era como si partes de la canción describieran lo que yo quisiera algún día sentir por alguien, no el hecho de estar en la situación, si no tener ese grado de apego con alguien que en caso de presentarse la situación, tu sentirías eso.
Hoy en día, esto a pasado a ser algo inexplicable. Normalmente uno pensaría que después de un considerable periodo de tiempo la canción iría bajando de posición para que otras con las que puedas indentificarte dependiento en la etapa que estés entren, pero no… No ocurre con esta, lo que me obliga a considerarla una de las canciones más especiales para mí. Y estoy seguro que para muchos otros que le den la oportunidad.
Si somos realistas y analizamos la canción, no hay nada que se pueda considerar fuera de lo ordinario: la instrumentación es muy simple, es decir, los instrumentos y notas no denotan nada complejo, la letra, a pesar de ser muy profunda, no se posiciona tan alto cuando es comparada con otras canciones de la misma cantautora, la estructura es básica. Entonces… Si no hay nada que sea fuera de lo ordinario ¿Qué es?.
Tengo una hipótesis. O muchas porque sí, me gusta pasar horas pensando sobre posibles explicaciones de un evento trivial que simplemente podría dejar ser.
La combinación de la letra, música y video es PERFECTA. Si pensamos un poco sobre ello nos daremos cuenta que es una canción que gente hoy, mañana o en diez años podría encontrar relevante para ellos. No es tan general pero tampoco tan específica, está justamente en medio. Dejen explico un poco esto: Supongamos que alguien escucha por primera vez y la conecta con su propia experiencia personal, la canción permite conectarla con básicamente cualquier persona. Es una canción que cae en la categoría de amor, pero no exclusivamente para tu pareja sentimental. Tómate unos segundos para hacer una lista de todas las personas a las que esta canción podría ser dedicada (Novia, novio, hermano, hijo, etc).
Esa flexibilidad siento que es la razón por la que la canción nunca ha caído de posición para mí, porque no importa en que etapa de la vida esté, siempre voy a poder escucharla y sentir que yo fui quien escribió la letra, sentir que lo que ella siente mientras canta nació en mí.
Independientemente de lo que opines del género de la canción, de la técnica vocal de la cantante o de la producción del video, te aseguro que habrá un momento en tu vida que puedas sentir que es parte de la canción.
Honestamente, “How” de Regina Spektor será por mucho tiempo, si no por siempre, una de las canciones que mantendré en mi baúl de favoritos.
